Ascender a la Liga Nacional es un proceso que a algunos clubes les toma años conseguir, incluso hay otros que han pasado décadas y no lo logran; no obstante, cuando obtienen el boleto, muchas veces sus dirigentes no están conscientes de la responsabilidad que viene implícita y terminan por volver al
finalizar la temporada.
Ese es el caso del Deportivo Coatepeque, que regresó a la máxima categoría en junio pasado y cinco jornadas antes de que concluya la presente campaña ya certificó su descenso.
Pero, ¿qué causa este fenómeno? Para el analista deportivo Rudy Martínez, quien se desempeña en ESPN Guatemala, los motivos son variados: “En primer lugar, considero que se planificó mal la competición, no se consideró la diferencia entre una y otra Liga y pensó que con la misma base podría mantenerse y la reacción fue muy tarde”.
“Llegaron otros técnicos y trataron de contratar a otros futbolistas, pero no encontraron la manera de redirigir el barco y terminaron por resignarse.
Además, hay que recordar que este torneo se redujo en cuanto a la cantidad de jornadas y también resultó clave para su pronto regreso”, consideró el analista.
“Otro detalle a tomar en cuenta es que desde un principio no se permitió ingresar en el círculo de la Liga Nacional y su administración se mantuvo al margen de ciertas normas que se trató de impulsar.
Incluso, fue el único que no contó con transmisión de sus juegos de locales, lo que también reduce el presupuesto”, señaló Martínez.
Por su parte, Luis Rolando Solares, periodista deportivo en TV Azteca Guatemala, manejó diferentes aristas que llevaron a las serpientes de vuelta a la división de ascenso.
“Este equipo se encuentra en una plaza con una activación económica importante, o sea que el problema no fue el dinero, sino las decisiones tomadas por sus dirigentes desde que subieron y durante el año, como puede ser el múltiple cambio de entrenadores (tres); además de la mala elección de futbolistas, pues no se puede competir en la Mayor con una base del cuadro de la Primera División y extranjeros que
desconocen el sistema”, resaltó.
“El punto más importante es que desde la Liga Nacional hasta la Tercera División deben alinear sus calendarios para comenzar y terminar en simultáneo, pues cuando Coatepeque y Zacapa ascendieron, el mercado de jugadores ya había sido acaparado por el resto de clubes y cuando buscan refuerzos ya no encuentran; eso es algo que ha afectado a estos y tantos otros conjuntos que se convirtieron en aves de paso”, agregó el entrevistado.
“Ojalá que Coatepeque regrese porque es una gran plaza, es el tercer estadio más grande del país, su afición se lo merece y su economía es activa”, complementó Solares.
Los expertos no coincidieron en sus opiniones respecto a cuál será el plantel que acompañe a las serpientes de regreso, pues Martínez considera que Zacapa todavía puede salvarse, mientras que para Solares son los supergallos los que firmarán el retorno a la división inferior.