Cada 45 minutos, un guatemalteco es diagnosticado con insuficiencia renal crónica. Esta enfermedad es el problema de salud pública número uno en el territorio nacional. Se estima que 1 millón 700 mil connacionales tienen algún grado del referido padecimiento.
Elio Pérez, jefe del Departamento de Nefrología y Trasplante del Hospital General San Juan de Dios, explicó que atienden alrededor de 300 enfermos al día y efectúa 40 trasplantes al año. La Fundación para el Niño Enfermo Renal (Fundanier) registra 133 pacientes; 36 reciben hemodiálisis y 119 han obtenido donación de riñones.
El jefe de la Unidad Nacional de Atención al Enfermo Renal Crónico (Unaerc), Pedro Dávila, comentó que los registros del Seguro Social y Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) suman cerca de 11 mil pacientes en terapia sustitutiva.
En el marco del Día Mundial del Riñón, que se conmemora cada segundo jueves de marzo, la Alianza Guatemala por la Salud Renal recomendó prevenir la dolencia.
En ese sentido, debe educarse a los niños para que coman sanamente; tener actividad física al menos 20 minutos diarios; disminuir el consumo de sal, evitar las bebidas endulzadas y tomar
suficiente agua.
“Las causas de esta afección son potencialmente prevenibles. Una alimentación no saludable provoca obesidad, sobrepeso y, consecuentemente, diabetes y presión alta”, explicó Randall Lou, coordinador del Programa Nacional de Salud Renal.