Redacción DCA: Jose Pelico y Giovanni Pérez
Las denuncias por posibles actos de corrupción presentadas formalmente o ventiladas por las autoridades están haciendo eco en el ente investigador.
La entidad encargada de las averiguaciones anunció que investiga de oficio ocho casos y cinco más que fueron colocados por autoridades del Gobierno. Finalmente, el Ministerio Público (MP) ha retomado su trabajo en esta materia, luego de que la ciudadanía y los funcionarios ejercieron presión para que se indague el actuar de la administración pasada.
Entre los casos bajo pesquisas, de oficio, están las irregularidades en la Autopista Palín-Escuintla, la adquisición de escaleras eléctricas y ascensores en el Aeropuerto Internacional La Aurora (AILA) y los posibles actos anómalos en la División de Puertos, Aeropuertos y Fronteras (Dipafront), de la
Policía Nacional Civil (PNC).
Además, dudas en el proyecto de construcción del puente Belice 2, el otorgamiento de licencias ambientales falsas en Chimaltenango, obra inconclusa en el paso a desnivel de zona 12 capitalina y el proyecto inacabado en el paso similar de calzada Roosevelt.
Adicionalmente, está el hallazgo de micrófonos en vehículos y oficinas del Ministerio de Comunicaciones.
La jefa del MP, Consuelo Porras, ha invitado al Gobierno a presentar las acusaciones sobre cualquier acto de corrupción.
Lizandro Acuña, analista del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos de Guatemala (Ipnusac), recordó que la función del MP, cuando existen suficientes indicios y denuncias, es la investigación. Recordó que la entidad estaba en deuda, principalmente en relación con hechos de corrupción durante gestiones anteriores.
“Guatemala tiene convenios internacionales, que la obligan a emprender acciones por medio de la Fiscalía para minimizar hechos de corrupción. En este ámbito (el MP) no había estado bien. Su actuar se deriva de las demandas de la presente administración y deberá hacer todo lo pertinente, independientemente de quiénes estén involucrados”, afirmó.
