Miembros de los medios de comunicación presenciaron ayer la inauguración de la Sala de Prensa en el Palacio Nacional de la Cultura, que llevará por nombre Ronaldo Robles. El espacio servirá para que los periodistas que cubren la fuente del Ejecutivo tengan un área para hacer su trabajo de manera cómoda y digna.
Con esta acción, el gobierno de Bernardo Arévalo y Karin Herrera resalta su compromiso de puertas abiertas con los profesionales de la información. “Por complicada que sea a veces esa relación entre funcionario y la necesidad de informar, estamos conscientes de que no hay democracia sin libertad de expresión”, expresó Arévalo.
De acuerdo con el mandatario, la habilitación de la sala es significativa porque rinde tributo a Robles (fallecido el 4 de febrero de 2023), quien apoyó su proyecto político, que al principio era solo una ilusión, con la convicción de que el país podía cambiar con el voto y la movilización de los ciudadanos. Haroldo Sánchez, secretario de Comunicación Social de la Presidencia, agregó que han visto cómo el número de periodistas exilados aumentó, pero con la llegada de las nuevas autoridades no ocurrirá más.
Fernando Barillas, en representación de la familia del homenajeado, agradeció este acto de justicia para el comunicador que desde su espacio ejerció ciudadanía y generó conciencia, un legado que permanecerá.