En la recta final del año, el empleo de los juegos pirotécnicos aumenta en el país, dado que estos se han convertido en parte importante de los festejos de los distintos eventos festivos de la época.
La costumbre ha cambiado con los años, al aparecer diversas variedades más sofisticadas de productos para niños y adultos; por ello, las autoridades llaman a un uso responsable y vigilado, con el objetivo de evitar accidentes que puedan ser generados por imprudencias.
Ante ello, los expertos aclaran que de forma errónea los fuegos artificiales se relaciona directamente con quemaduras, cuando en realidad el problema se genera por descuidos o ligerezas al momento de utilizar los petardos.
El Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) refiere que en diciembre y enero se reporta el incremento del 25 por ciento de este tipo de lesiones en niños, del cual el 7 por ciento se asocia con la pirotecnia, mientras que la mayoría la causa líquidos calientes.
Diana León, asesora de ventas de la distribuidora Volcancito, resaltó que este mercado es parte de los guatemaltecos, por lo que pide no estigmatizar el consumo, sino que se debe exhortar a la responsabilidad y supervisión por parte de los adultos, a fin de garantizar el pleno disfrute de esta tradición.
Restricciones
El Decreto 123-85, Ley de Especies Estancadas, reformado por el Decreto 73-2007, prohíbe importar, producir, fabricar, almacenar, depositar, distribuir y comercializar silbadores y cachinflines.
Además, estipula sanciones y multas de hasta Q50 mil.