En el marco de las acciones del Plan Belén, la Dirección de Atención y Asistencia al Consumidor (Diaco) encabezó ayer una supervisión a comercios que venden juegos pirotécnicos.
“Entre lo verificado está que los propietarios o encargados de expendios tengan su constancia de capacitación extendida por los cuerpos de socorro, extintores, toallas, recipientes con agua y arena”, dijo Herbert Ordóñez, jefe del Departamento de Verificación y Vigilancia de la entidad.
50 mil quetzales es la sanción máxima que se impondrá.
La tarea tuvo lugar en el Mercado La Terminal, zona 4, y en el plan participan la Policía Nacional Civil (PNC), los Ministerios de Salud y de la Defensa, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres y la Procuraduría de los Derechos Humanos, entre otras instancias.
La acción será extendida a los demás departamentos del país, con el objetivo de prevenir accidentes debido a la mala manipulación de los citados artefactos. La Ley de Especies Estancadas, Decreto 123-85, establece multas de hasta Q50 mil contra quienes infrinjan esta norma.