En una nueva jornada de negociaciones, los agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) se agenciaron otros éxitos a favor de la mayoría de guatemaltecos, a quienes garantizaron su derecho a la libre locomoción, consagrado en la Constitución Política de la República.
Como ha sucedido a lo largo de estos eventos, los uniformados fueron ejemplo de tolerancia y volvieron a demostrar que con diálogo y respeto se obtienen acuerdos y se evita la confrontación. Según lo informado por el director de la PNC, Edwin Ardiano López, ayer se desarrollaron 31 conversaciones con grupos inconformes, muchas de las cuales concluyeron con la liberación de pasos o el permiso para que unidades relacionadas con los servicios de salud y comercio continuaran sus recorridos.
Lo cierto es que el profesionalismo y respeto de las garantías individuales y colectivas ha marcado la labor de los policías, quienes se mantienen en apresto para servir y garantizar la tranquilidad de los connacionales.
El actuar de los servidores también refleja la posición del presidente Alejandro Giammattei y del encargado del Ministerio de Gobernación (Mingob), David Napoleón Barrientos, quienes en reiteradas ocasiones han expresado su convicción de respetar las manifestaciones ciudadanas, como sucede en las democracias del mundo.
Las máximas autoridades del Organismo Ejecutivo y de la cartera del Interior han ordenado evitar el uso de la fuerza y no caer en la provocación, como algunas personas o grupos quisieran. En los operativos del pasado miércoles, Ardiano López lideró las pláticas y, en todo momento, expresó que “el buen abordaje de las situaciones ha contribuido a que no se reporten altercados significativos”.
Si bien ha sido evidente la paciencia y buena disposición del Gobierno, conviene recordar lo expresado por el jefe de Estado, en el sentido de advertir que no se permitirá el vandalismo ni los abusos contra los compatriotas, la mayoría de ellos al margen de estos movimientos.