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Con susto y remontada incluida, como ya es habitual, el Liverpool certificó el pase a octavos de final de la Copa de la Liga contra el rebelde Leicester City (3-1).
El de los foxes, equipo del Championship esta temporada después de su sorprendente descenso, coqueteó con tirar al gigante en Anfield, después de adelantarse en el minuto tres y aguantar la renta hasta la segunda mitad.
Kasey McAteer, en una contra propiciada por un error defensivo del Liverpool, no falló delante del irlandés Caoimhin Kelleher y los de Jürgen Klopp, con un once lleno de suplentes sin Mohamed Salah, Luis Díaz, Alexis Mac Allister ni Virgil Van Dijk, se tuvieron que poner el buzo de trabajo para la remontada.
Cody Gakpo hizo el 1-1 y Klopp movió el banquillo en busca de más pólvora con la entrada de Núñez y Dominik Szoboszlai, y el húngaro respondió con menos de cinco minutos sobre el campo.
Tomó una pelota en la frontal y la estrelló en la escuadra, un auténtico golazo que valió la clasificación del Liverpool a octavos de la Copa de la Liga.
Con el Leicester volcado para buscar el empate y los penales, Diogo Jota hizo el 3-1 definitivo.