“Expreso mi profunda preocupación y solidaridad con las familias afectadas”, escribió en sus redes sociales el presidente Alejandro Giammattei, en alusión a la tragedia ocurrida la madrugada de ayer, cuando se desbordó el río El Naranjo, que causó muertes y desolación en el país.
Las palabras del mandatario fueron acompañadas de instrucciones, para que ministerios y secretarías de Estado, por intermedio de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), accionaran y asistieran a los damnificados por las correntadas.
El despliegue de personal, especialmente de los ministerios de Gobernación (Mingob) y Defensa Nacional (Mindef), se hizo notar de inmediato, lo que permitió la búsqueda y rescate de perjudicados. De acuerdo con información oficial, por lo menos 6 viviendas fueron arrasadas, lo que
dejó decesos y desaparecidos.
“Hemos desplazado tres fuerzas de tarea con 94 expertos, incluyendo personal de la Conred, Ejército, Policía Nacional Civil (PNC), bomberos Voluntarios y Municipales, Policía Municipal de Tránsito (PMT) de Guatemala y Mixco, así como Cruz Roja”, citó el dignatario, quien instruyó el traslado inmediato de los hogares que están en riesgo.
En su reciente visita a Nueva York, donde participó en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el gobernante pidió más apoyo de los países desarrollados para enfrentar las consecuencias del cambio climático y recordó que los impactos de los fenómenos naturales recaen, en especial, en Centroamérica y el Caribe, que tienen un impacto insignificante en el calentamiento global.
“Permanezcamos unidos en este momento tan difícil. Esta catástrofe nos recuerda, de manera dolorosa, la realidad de la variación atmosférica. Es imperativo actuar en pro de países indefensos como Guatemala. Todas las naciones debemos actuar para un futuro más sostenible”, reflexionó Giammattei, tras reiterar su fraternidad con los deudos y víctimas.