En respuesta a la decisión del Gobierno de El Salvador de expulsar a colombianos de su territorio acusados de cometer delitos, el Ministerio de Gobernación (Mingob) ha redoblado la seguridad en la frontera compartida.
Según las autoridades, el objetivo de estos operativos es salvaguardar la integridad y tranquilidad de los guatemaltecos y prevenir posibles problemas derivados de la presencia de estos individuos.
“Estamos atentos en la frontera con El Salvador, por algunas personas que quieren ingresar en el país debido a las medidas de excepción adoptadas en esa nación”, comentó el titular del Mingob, David Napoleón Barrientos.
2 instituciones de seguridad vigilan el límite territorial.
De momento, se ha desplegado a agentes de Investigación Criminal y de Inteligencia Civil a los límites para reforzar el trabajo de la Policía Nacional Civil (PNC), mientras se elabora un plan específico.
Esto conlleva un aumento en la cantidad de elementos y recursos dedicados a garantizar el control y seguridad. Además, se han establecido mecanismos de información y cooperación para el
intercambio fluido de datos sobre individuos con antecedentes o vínculos sospechosos.
Por su parte, el vocero del Ministerio de la Defensa Nacional, Rubén Téllez, comunicó que los militares han mantenido presencia en la frontera desde que El Salvador declaró la guerra a las pandillas, con el fin de evitar que lleguen a territorio guatemalteco.
Agregó que actualmente cerca de 700 soldados resguardan estas áreas y apoyan a la PNC y, según lo amerite la situación, se podrían destinar más efectivos o de equipo.