La Pluma Escarlata
Guillermo Monsanto
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En el Museo Naval de Madrid me topé con una pintura que captó mi atención: el retrato de José de Bustamante y Guerra (1759-1825), quien en vida fue teniente general de la Gran Armada Española y, entre otros cargos políticos, presidente de la Audiencia de Guatemala entre 1811 y 1817/18 (Diccionario Histórico Biográfico de Guatemala).
Este personaje nació en Santander, España, y tuvo una carrera ascendente en la que fue acumulando diferentes tipos de distinciones. Su paso por Guatemala fue turbulento debido a diferentes sublevaciones en El Salvador y Nicaragua. Esto, además de no haber sido bien recibido por la aristocracia local por distintas razones proindependentistas.
Parafraseando la fuente, luego de una sumatoria de desaciertos, persecuciones y una violencia mal manejada en junio de 1817, la Corona lo reemplaza y lo somete a un Juicio de Residencia. Finalmente entregó el cargo, no sin oposición, en marzo de 1818.
Regresemos al óleo, pese a lo odioso del personaje. Esta pintura tiene su par en Guatemala en una miniatura de Francisco Cabrera (1780-1845), la cual se intuye, fue realizada por el célebre artista antes de 1818. Lo interesante en la comparación de ambos trabajos es que, a pesar de las diferencias y la técnica, ambas fueron confeccionadas en espejo.
Pero ¿cuál es la razón? ¿Cuál se pintó primero? Y la segunda, ¿es una interpretación de la primera? Ambas piezas poseen una cierta dureza que, en Cabrera, podría entenderse por ser una obra temprana. La del museo está acompañada de accesorios diversos; entre ellos, la Orden de Santiago, que no aparece en la acuarela de 6.5 x 5.5 centímetros de la chapina. Esta última, plenamente identificada, mientras que la española luce como anónima y parece copia reinterpretada de la de Cabrera. ¿Será también guatemalteca?