Los pilotos de motociclismo Diego Bauer y Sebastián Valls, campeón y segundo lugar en la modalidad de enduro, respectivamente, viajaron el domingo último para participar en la cuarta fecha del Campeonato Mundial Extremo de dicha disciplina, a desarrollarse en Sibiu, Rumania, entre el 22 y 30 de julio próximos.
Bauer y Valls han logrado viajar con el apoyo de algunos patrocinadores, pero buscan mejorar esas condiciones.
Ambos pilotos aprobaron los exámenes médicos y físicos de rigor, la semana pasada, y fueron juramentados por la Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala. Aunque la planificación que tenían era de volar ayer, un problema con la aerolínea los obligó a irse un día antes; no obstante, se cumplirá con los tiempos para aclimatarse y entrenar antes de la extenuante prueba.
“Con Sebastián (Valls) vamos por cuarta ocasión a representar a Guatemala en este certamen, que está demás decir que es complicado y conocido por ser la jornada de enduro más difícil del mundo”, explicó Bauer.
“La carrera consiste en un prólogo extremo en ciudad, el 25 de julio, y cuatro días de montaña. La mayoría que sigue este deporte ha visto que dentro de una urbe colocan una cantidad de obstáculos que se deben sortear y determinar las posiciones de salida en todas las categorías: oro, plata, bronce, hierro y átomo. Después nos trasladamos a los picos donde se hacen 8 horas de competencia y se queman hasta 5 mil calorías por día”, añadió Valls.
“Se sufre mucho en cada ascenso y descenso, no hay caminos y solo con un GPS debemos buscar nuestro destino, en medio de terreno escabroso, vegetación y fauna salvajes, pero es lo que nos gusta hacer”, consideró Bauer.
“El enduro se ha dividido en las últimas dos décadas en su versión tradicional y el extremo, ambos con días largos, pero la diferencia es la velocidad, pues son terrenos tan difíciles que es imposible superar los 15 km/h”, señaló Valls.
“La inclinación del terreno es casi vertical, que cada día se suben y se vuelven a bajar ente 10 mil y 13 mil metros; nunca vamos en plano, donde incluso se ha visto a osos pardos perseguir a los pilotos”, agregó Bauer.
Con el apoyo de la Federación Nacional de Motociclismo, los pilotos irán ataviados con indumentaria que los identifique como guatemaltecos; lo mismo sus motocicletas, que llevarán calcomanías con los colores nacionales.