La Brigada de Paracaidistas General Felipe Cruz es una unidad especial del Ejército que se encarga de realizar operaciones complicadas y de entrenar a soldados en estas técnicas.
Con sede en el Puerto San José, Escuintla, bajo el control del Estado Mayor de la Defensa Nacional, cuenta con personal altamente capacitado, dotado de tecnologías y estrategias militares de última generación, las que les permiten llevar a cabo misiones en cualquier entorno y condición climática.
La formación abarca desde el manejo del equipo hasta conocimientos de aerodinámica. Además, ejercicios prácticos de saltos a diversas alturas, diurnos y nocturnos.
La unidad se mantiene en apresto para tareas militares, de cooperación integral o de apoyo interinstitucional inmediato, que garanticen la seguridad de la población.
Entre las características de la brigada destacan la sorpresa, rapidez y maniobra, factores que aseguran el éxito de las operaciones.
El entrenamiento es constante y se perfecciona por medio de cinco técnicas fundamentales: 1. Seguir órdenes del jefe de salto. 2. Controlar el cuerpo durante la caída libre. 3. Dominar el paracaídas en el descenso, con el fin de evitar colisiones y recuperar equipo. 4. Realizar aterrizajes correctos, que eviten lesiones. 5. Maniobrar el aparato después del descenso a tierra, de tal forma que impida ser arrastrado por los vientos.
Ejemplo de valentía
Con una carrera militar de 11 años, la teniente Daniela Ruiz Ibarra es la primera y única instructora en la escuela. Tiene una pasión por la profesión, que la ha llevado a practicar salto libre durante los últimos cinco años.
En este ejercicio, la experta despliega el equipo hasta el límite de tiempo.