Los recientes informes emitidos por 2 de las 3 calificadoras de riesgo más importantes del mundo colocan a Guatemala como una nación que destaca en Latinoamérica por su responsabilidad en el manejo macroeconómico y financiero, lo cual la ha convertido en un lugar seguro, confiable y atractivo para las inversiones.
En este sentido, la política exterior que impulsa el jefe de Estado también ha permitido que el país retome el liderazgo regional de antaño y vuelva a ser el interlocutor que lidere las estrategias centroamericanas en materia de desarrollo social y económico.
Desde esta perspectiva, conviene analizar la decisión del Gobierno de apostar por fortalecer las principales carreteras de la nación, dada la trascendencia que tienen para el acceso a servicios públicos y para cimentar el comercio local y externo.
Las reparaciones, que ya se encuentran en marcha, alcanzarán este año 11 852
kilómetros, los que se ubican en los cuatro puntos cardinales del territorio.
Es preciso anotar que las acciones impulsadas responden a un programa de trabajo definido con antelación, que tuvo como base la Política General de Gobierno 2020-2024, que es el norte que guía a las actuales autoridades del Organismo Ejecutivo.
En concordancia con el eje de Economía, Competitividad y Prosperidad, el Presidente de la República instruyó a los ministerios y direcciones correspondientes a ocuparse del tema y los resultados están a la vista. El detalle de los trabajos advierte lo siguiente: 9276 kilómetros rehabilitados en 2020; 9969 recuperados en 2021 y 12 140 en 2022.
“Lograr el objetivo de un mayor crecimiento financiero y el aumento significativo de las fuentes de empleo sostenibles” era la aspiración de los estrategas y creadores de la Política, con la que, valga decir, se ha logrado transformar al país de la eterna primavera.