Los restos de 17 connacionales que perdieron la vida en un incendio en Ciudad Juárez, Chihuahua, México, el 27 de marzo, llegaron anoche a la Fuerza Aérea Guatemalteca (FAG) y fueron trasladados a sus municipios de origen. La repatriación fue encabezada por el canciller guatemalteco.
Los gastos del retorno los asumió el Gobierno del país vecino. De la FAG, 3 de los féretros partieron hacia diferentes municipios del departamento de Huehuetenango, 5 a Sololá, 2 a Suchitepéquez y 2 a Alta Verapaz. Además, Izabal, Totonicapán, Chimaltenango, Quiché y Quetzaltenango recibirán un cuerpo cada jurisdicción.
Posteriormente, arribarán al territorio nacional otras dos posibles víctimas, una vez se confirme plenamente su identidad por medio de ADN. Al parecer, estos eran oriundos de Nentón, Huehuetenango, y San José Pinula, Guatemala.
De 9 departamentos del país procedían las víctimas.
Asistencia total
Desde que ocurrió el incidente, el Gobierno de Guatemala ha trabajado sin cesar para brindar asistencia y protección a los heridos que aún se recuperan en distintos hospitales de México.
Además, ha gestionado que familiares de los lesionados viajen a ese país para acompañarlos. Estas acciones se han llevado a cabo por medio de la Dirección General de Asuntos Consulares y Migratorios de la Cancillería y su red de representaciones.
El Ejecutivo lamentó la tragedia y se solidarizó con las familias de los connacionales. El 10 de abril, el ministro de Relaciones Exteriores visitó en la nación azteca a los heridos en el siniestro y ultimó los detalles pendientes para el regreso al país de quienes perdieron la vida.