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Un gol del brasileño Roberto Firmino, que culminó una estupenda acción de Trent Alexander Arnold, premió el empuje del Liverpool que evitó la derrota en Anfield (2-2) y privó de un nuevo triunfo al Arsenal, que se dejó dos puntos a última hora y parte de su renta en el liderato respecto al Manchester City.
El tanto del atacante sudamericano, que ingresó en la segunda parte, reconfortó la insistencia del conjunto de Jurgen Klopp, que arrinconó durante la mayoría de los minutos al líder y que pudo haber sellado incluso el triunfo si el egipcio Mohamed Salah no hubiera fallado un penal que lanzó fuera antes de alcanzar la hora de partido.
Fue capaz el Liverpool de frenar la impecable racha del conjunto de Mikel Arteta, que arribó en Anfield con siete victorias consecutivas y salió del campo red con un punto que deja en seis su ventaja sobre el vigente campeón, sobre el cuadro del también español Pep Guardiola, que además tiene un partido
menos que el cuadro londinense.