Johann Navarrijo
integrante de Comisión Economía Naranja Agexport
El avance tecnológico ha llevado a la creación de herramientas de inteligencia artificial (IA) que han transformado muchos sectores, incluyendo el trabajo audiovisual. En la actualidad, la IA se utiliza cada vez más en la creación de contenido audiovisual, desde la producción hasta la posproducción y la distribución.
Si bien esto puede parecer una amenaza para los profesionales del sector, la realidad es que la IA tiene el potencial de mejorar el trabajo audiovisual y hacerlo más eficiente.
Es curioso que el texto anterior fue escrito por la popular IA ChatGPT, y es que cada día que pasa nos podemos encontrar con diversidad de estas herramientas que pueden ser considerados como beneficiosas por algunos y como amenazas por otros.
Ninguna IA puede sustituir el proceso creativo de un ser humano.
La pregunta crucial es ¿Pueden las inteligencias artificiales sustituir el trabajo que realizan miles de personas? Claramente aún no hay una respuesta a esta pregunta, pero en la industria creativa tenemos ya a disposición una gran cantidad de estas herramientas que pareciera que están ganando cada vez más terreno. Tenemos herramientas como generación de subtítulos automáticos, mejoras automáticas de fotografía, correctores de color, restauración de fotos y audio, eliminación de ruido en audio, generación de textos para redes sociales, por no mencionar la infinita posibilidad de ChatGPT para generar guiones, grillas de programación, textos, etc.
La IA tiene el potencial de transformar el trabajo audiovisual de muchas maneras, desde la automatización de tareas hasta la mejora de la calidad del contenido. Sin embargo, es importante destacar que la IA no es una solución completa para el trabajo audiovisual o de marketing en redes sociales.
La creatividad y la intuición humana siguen siendo esenciales para la creación de contenido audiovisual de alta calidad. Además, la IA puede no ser capaz de replicar ciertos elementos del trabajo audiovisual, como el enfoque en el storytelling y la emoción, o todo el proceso creativo que conlleva la creación de una marca, de un video, de una fotografía real, que son cruciales
para conectar con la audiencia.
Por lo tanto, los profesionales del sector debemos aprender a aprovechar la IA como una herramienta complementaria para nuestro trabajo y no como una amenaza para el mismo.