Miles de personas han escalado hasta la cumbre del volcán de Pacaya, pero únicamente el doctor Alfredo Mackenny ha logrado conquistar la punta de este por más de 1150 ocasiones para documentar las distintas actividades del coloso desde 1961. Desde los 10 años de edad, Mackenny se interesó en el mundo de la fotografía, y su padre le regaló su primera cámara con la que captó distintos paisajes durante su estadía en Quetzaltenango.
El guatemalteco ha dejado huella en el ámbito global al capturar momentos únicos, que han quedado registrados en los libros de historia vulcanológica, al estar de cerca en los distintos cráteres y erupciones del Pacaya.
El experimentado montañista, a sus 91 años, también ha logrado ser productor de largometrajes que describen la cultura nacional; entre ellos, sobre las celebraciones de la Semana Santa y fiestas patronales de los diferentes municipios del país.
Sus ascensos al volcán han sido tantos, que la comunidad de San Vicente Pacaya bautizó uno de los cráteres con el apellido del escalador.
“En el 61 llegamos a la punta y vimos tres cráteres con fumarolas. El río de lava era maravilloso y yo me volví loco, y decidí desde entonces cada domingo escalar y documentar todo lo posible”, relató el ilustre vulcanólogo.
La semana pasada, la Municipalidad de Guatemala reconoció el trabajo de Mackenny como un ciudadano ilustre, gracias a sus distintos proyectos documentados y de gran ayuda para el estudio del coloso en el ámbito internacional.