Sebastián Toledo
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La Organización de las Naciones Unidas practica el Examen Periódico Universal (EPU) a los Estados partes, para constatar el cumplimiento de los instrumentos de derechos humanos adoptados por las naciones como parte de su marco político y jurídico interno. Un ejercicio que permite reflexionar sobre la efectividad de las medidas administrativas y políticas que los países implementan, para atender las necesidades y demandas de sus habitantes, con énfasis de los sectores en vulnerables.
Guatemala se sometió al 4º. examen el 25 de enero de 2023, oportunidad en la que refirió los esfuerzos que se impulsan desde la administración pública para atender las orientaciones de cada instrumento adoptado. Las acciones que se implementan para la reducción de las inequidades y alcanzar una nación justa, pacífica e incluyente, donde todos y todas contemos en condiciones de igualdad.
Guatemala se sometió al 4o. examen el 25 de enero de 2023.
Los representantes de los Estados partes de la ONU reconocieron los esfuerzos que Guatemala realiza en diferentes campos e hicieron observaciones que serán de mucho provecho. Se plantearon preocupaciones en los asuntos de migrantes, violencia contra la mujer, pueblos indígenas, niñez y juventud, discapacidad, LGTVIQ+, justicia, periodismo, protección a los defensores de derechos humanos,
entre otros.
Constituyen recomendaciones que el Estado puede traducir en un plan de acción para fortalecer las políticas públicas, revisar y actualizar su marco jurídico e implementar medidas de promoción y protección social. Tal labor le debe llevar a coordinar con las organizaciones de la sociedad civil que, para el caso del EPU, se ha conformado una coalición de más de 100 instancias cuyos aportes serán de importancia para alcanzar el desarrollo de sectores históricamente excluidos, en línea con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Los asuntos de discapacidad en esta coalición son representados por el Comité Pro Ciegos y Sordos de Guatemala, el Colectivo Vida Independiente y la Asociación de Ciegos para la Cultura y el Deporte, representación a la que deben sumarse las demás agrupaciones del sector. De tal manera que las propuestas que se impulsen tengan la fuerza suficiente para superar y atender las preocupaciones manifestadas durante el 4º. examen.