Fotos: Mario León y cortesía de David Urbina
Manuel David Urbina, de manera independiente ha participado en gestión cultural y museográfica para varios proyectos, y ha trabajado en proyectos de exhibiciones en espacios culturales, galerías privadas y centros de arte del paíos, así como en el extranjero.
En esta entrevista nos habla sobre el panorama artístico nacional.
¿Cómo está el arte en el país?
Observo que falta el compromiso de una gestión seria y coherente. Ojalá que los artistas se den cuenta de qué es lo que les conviene, como por ejemplo, si montar varias exposiciones, que no aporten a su carrera es lo mejor para ellos o que expongan una vez al año o cada dos años y seleccionar ciertos proyectos.
¿Quiere decir que no es recomendable que expongan varias veces al año?
El artista cree que cuanta más exposición tenga se da más a conocer; es lo contrario, aunque depende mucho del punto en el que se encuentre, porque algunos jóvenes comienzan y quieren comerse el mundo. Deben concentrarse en quien les está midiendo esa producción, pues no todo lo que están haciendo va a estar bien.
¿Qué les aconseja a los creadores?
El apoyo de la museografía porque es una herramienta global; sin embargo, es personal el enfoque del museógrafo. Una museografía no debe de excederse de los recursos que usa porque lo que deseamos destacar es la obra. También existen los complementos como el texto de sala, la iluminación, ciertos colores, pero eso ya es solo apoyo.
¿Quiénes han dejado huella en el país y en el exterior?
Hay una línea de artistas de arte conceptual contemporáneo importante y comprometido; por ejemplo, están Ángel y Fernando Poyón, Benvenuto Chavajay, Manuel Chavajay, Ángel Ceibal, Jorge de León y más. Ellos pertenecen a un arte global, el que trasciende, no solo realizan el digamos funcional, decorat ivo, estético, sino que está dirigido a un público más formal. La mayoría ya no participa en proyectos locales, pues están en otra línea de construcción y conceptos.
