Zsolt Gerendas Coordinador de la Comisión de Laboratorios de Agexport
Desde el inicio de la época de la globalización, particularmente desde la entrada en vigor del acuerdo de la Organización Mundial del Comercio, las economías del mundo se han ido especializando y destacando; cada una de ellas, en aquellos sectores y desarrollo para los que tienen ventajas competitivas y comparativas.
Una característica de esa especialización es que los países atraen y desarrollan capacidades para la investigación e innovación y también la capacidad para el control y gestión de calidad en esos sectores para los que tienen una ventaja. De tal forma que, si un país o región se especializa en una actividad, generalmente encontraremos laboratorios con avanzada tecnología que realizan la investigación y el control de calidad de ese tipo de productos en esa región.
En Guatemala, un alto porcentaje de los laboratorios presta servicios a la cadena agroalimentaria. Contamos con laboratorios muy especializados que sirven al sector agrícola y al sector de alimentos. Sus servicios les permiten a estos sectores obtener información para mejorar constantemente sus procesos y productividad.
Contamos con laboratorios muy especializados que sirven al sector agrícola.
Por ejemplo, recientemente, se pudo hacer el estudio de suelos del país en las regiones con potencial de producción para el cacao y determinar que estos están libres, o con niveles inferiores a los límites establecidos, para poder producir cacao libre de cadmio para la Unión Europea.
Para el sector de alimentos, el cual genera el 18 por ciento del valor de las exportaciones totales de Guatemala, los laboratorios prestan los servicios que permiten cumplir con requisitos de los mercados más exigentes alrededor del mundo. Por ejemplo, los controles que solicita la ley FSMA de Estados Unidos para los productores de alimentos, los análisis de presencia de toxinas o alérgenos en alimentos para Japón y otros destinos, como el caso de las exportaciones de café, granos o harinas; o los controles de residuos de plaguicidas o antibióticos en alimentos destinados a Europa.
En Guatemala se encuentra el único laboratorio de la región Centroamericana que ha sido reconocido para hacer los análisis de enfermedades cuarentenadas en México para exportar camarón a ese mercado. Otros servicios que se realizan incluyen los análisis para redactar los etiquetados nutricionales, tablas de contenido calórico de los alimentos, y otros datos que requieren diferentes mercados para autorizar las importaciones.
El sector textil, primer lugar en el PIB industrial del país, cuenta con dos laboratorios internacionales ubicados en Guatemala, que prestan los servicios para el control de calidad de la materia prima y para el control de las características requeridas de las prendas de vestir, tales como color, resistencia, reacción a los diferentes detergentes y otras pruebas muy específicas del sector.
También se hacen las pruebas de seguridad especiales para artículos infantiles o pruebas de inflamabilidad en textiles que deben estar en áreas seguras en caso de incendio, así como otras pruebas que sirven en la investigación de procesos para mejorar la calidad y la seguridad de los artículos que producimos.
Otro sector importante es el de salud, incluyendo aquellos que le prestan servicios al sector farmacéutico. Estos se dedican a realizar investigación médica y que incluso colabora en investigaciones a nivel regional desde Guatemala. Desde aquí se apoya con laboratorios clínicos especializados que le dan seguimiento al paciente y generan información útil para las conclusiones de la investigación.
Esta capacidad es muy valiosa para superar hitos de salud que afectan a la población. Existen otros casos en los que los laboratorios constantemente colaboran para que la industria mantenga su nivel competitivo y pueda superar las barreras de los mercados de exportación. Si deseamos abrir nuevas oportunidades de negocio para los emprendedores, es importante mantener y fomentar el desarrollo de la infraestructura de calidad, la investigación aplicada y las competencias científicas de los jóvenes guatemaltecos.