Foto: Archivo
Durante todo el año, en nuestro país se viven tradiciones que toman mayor auge debido a la importancia que tiene para la población.
Un claro ejemplo de esto es la Semana Santa guatemalteca, que hace poco fue nombrada Patrimonio de la Humanidad.
Celebraciones milenarias
En diferentes departamentos del país se retomaron actividades que fueron suspendidas debido a la pandemia del Covid-19, como por ejemplo, el vuelo de los barriletes gigantes de Sumpango y Santiago Sacatepéquez, que convocan a miles de espectadores que admiran la belleza de estas obras.
El vuelo del Palo Volador es algo que también se retomó; los cortejos procesionales en la capital y el interior del país fue algo que también su pudo vivir para alegría de los feligreses.