Saulo De León Durán
Superintendente de Bancos
El titular de la Superintendencia de Bancos (SIB), Saulo De León, asumió el cargo en octubre de 2022. Es abogado y notario por la Universidad Francisco Marroquín, con maestría en Administración de Empresas y especialización en Finanzas y certificación en Gestión de Riesgos en Instituciones Financieras, por el INCAE Business School.
Tiene experiencia en banca, leasing, fideicomisos y estructuración de créditos internacionales, regulación financiera y administración de riesgos, así como en materia de prevención del Lavado de Dinero u Otros Activos, el Financiamiento del Terrorismo y el Financiamiento de la Proliferación de Armas de Destrucción Masiva en Guatemala. Entre otros cargos, fue intendente de Verificación Especial en dos períodos (2008-2010 y 2018-2022).
Cuéntenos, ¿cómo está estructurado el sistema financiero supervisado?
Está dirigido por la Junta Monetaria, con el apoyo de dos instituciones técnicas: el Banco de Guatemala, que determina la política monetaria, cambiaria y crediticia del país, vela por la liquidez y solvencia del sistema bancario nacional, asegurando la estabilidad y el fortalecimiento del ahorro nacional, y la Superintendencia de Bancos, que realiza la vigilancia e inspección de las entidades financieras supervisadas, a fin de que administren adecuadamente los riesgos que asumen, y cumplan la normativa y reglamentación que les aplica.
También incluye los entes supervisados que deben gestionar las instituciones financieras de acuerdo con los riesgos que asuman, observando la ley y reglamentación correspondientes.
En ese contexto, ¿cuál es el rol de la SIB y los bancos dentro de ese sistema?
El objetivo de la vigilancia e inspección que realiza la SIB es que las entidades supervisadas adecúen sus actividades y funcionamiento a las normas legales, reglamentarias y a otras disposiciones que les sean aplicables, y evalúen el riesgo que asumen en las operaciones que realizan.
No obstante, como las actividades de las entidades supervisadas son diversas y voluminosas, la supervisión se enfoca en las más relevantes o que conllevan mayor riesgo sobre la base del modelo de supervisión basado en riesgos que se aplica, a fin de eficientizar los recursos limitados para la supervisión.
¿Cómo llevará a cabo su gestión?; es decir, ¿cómo será su supervisión del sistema financiero?
Quiero resaltar que la SIB tiene dos funciones sustantivas, la supervisión del sistema financiero y la prevención del lavado de dinero u otros activos y del financiamiento del terrorismo.
Sobre la supervisión que llevaré a cabo, es importante indicar que cuento con un equipo de trabajo de profesionales de los cuales el 89 por ciento posee un nivel académico de licenciatura y 80 por ciento, de maestría; destacan diversas profesiones que representan un cúmulo de experiencia profesional y laboral importante para cumplir las funciones asignadas.
Una de las primeras actividades que ocupó mi agenda, fue la revisión del Plan Estratégico Institucional, de lo cual se establecieron líneas enfocadas principalmente en la modernización, transformación digital de los procesos internos y la adecuada gestión de proyectos.
Esto conlleva un cambio que nos permitirá mantenernos actualizados en la supervisión de la gestión bancaria.
Mencionó modernización y trasformación digital de la institución. ¿Podría profundizar al respecto?
Estamos en el mejor momento para realizar cambios, revisar, analizar y mejorar nuestros procesos internos, transformarlos digitalmente, agilizar los mecanismos de comunicación y traslado de información, gestionar los proyectos institucionales de manera integral a efecto de direccionar de mejor manera los recursos, fortalecer las capacidades del recurso humano, sumado al fortalecimiento de la supervisión acompañado de un marco regulatorio robusto y moderno, para que la función supervisora esté en concordancia con las condiciones cambiantes del mercado financiero y las innovaciones que conlleva.
La SIB es un actor clave en el sistema de banca central y en los agentes económicos. Algunos de los desafíos identificados son la evolución del sistema financiero tras la pandemia del Covid-19, la incorporación a la economía del dinero digital, el desarrollo de la bolsa de valores, la conveniencia de la incorporación del sector no bancarizado al sistema financiero y continuar fortaleciendo el trabajo que realiza la IVE (Intendencia de Verificación Especial), entre otros.
Durante su gestión, ¿qué percepción de la SIB le gustaría que tuviera la población?
Que tengan la certeza de que la SIB velará porque cada agente que integra el sistema financiero supervisado cumpla el rol que la ley y la reglamentación dictan a cada uno.
Trabajaremos para fortalecer los esquemas de supervisión, regulación y gestión en beneficio de la población a fin de coadyuvar en la construcción de una sólida plataforma económica para el desarrollo de nuestro país. Como funcionario público, estoy comprometido con el deber de servir con entrega y honestidad desde el puesto que desempeño.
Compromiso con el deber de servicio
Conforme a lo establecido en los artículos 132 y 133 de la Constitución Política de la República de Guatemala, la estructura del sistema financiero está dirigido por la Junta Monetaria, que cuenta con el apoyo de dos instituciones técnicas, el Banco de Guatemala y la Superintendencia de Bancos (SIB). Por otra parte, este sistema también lo componen las entidades supervisadas a que se refiere el Artículo 133.
De acuerdo con lo establecido en el Artículo 21 de la Ley de Bancos y Grupos Financieros, el Consejo de Administración del banco es el responsable de la liquidez y solvencia de este, así como de definir la política financiera y crediticia, además de controlar su ejecución sin perjuicio de las demás disposiciones legales y contractuales que le apliquen.
“Como funcionario público, estoy comprometido con el deber de servir con entrega y honestidad desde el puesto que desempeño”, afirmó el titular de la SIB, Saulo De León Durán.