Fotos: EFE
Un gol de Youseff en-Nesyri al minuto 42, cuando se adelantó en el remate a la salida de Diogo Costa y a la oposición de Ruben Dias, impulsó a Marruecos a las históricas semifinales del Mundial de Catar 2022, instancia a la que jamás había llegado un equipo africano, y eliminó a Portugal y a Cristiano Ronaldo, que se despidió de la Copa del Mundo sin el trofeo, en la suplencia, con 50 minutos de recorrido y sin ninguna ocasión.
Las paradas de Bono, sobre todo en un tiro de Joao Félix en el tramo final, completaron la hazaña de Marruecos, entre la apoteosis de los miles de aficionados que acudieron al estadio de Al Thumama.
El conjunto de Walid Regragui se ha convertido en la auténtica sensación del torneo. A su estilo, a su forma, con un planteamiento igual de lícito que cualquier otro. La defensa, el orden, la disciplina, para acabar con rivales superiores. Puede gustar más o menos. Pero lo que hace lo ejecuta con auténtica maestría. Irreprochable.