Ignacio López-Goñi
Miembro de la SEM (Sociedad Española de Microbiología) y Catedrático de Microbiología.
Representa hasta el 4 por ciento de la microbiota fecal total desde los primeros años de vida hasta que somos ancianos, se ha aislado incluso en muestras de individuos centenarios. Akkermansia muciniphila produce ácidos grasos de cadena corta que pueden desempeñar un papel importante en la salud y el estado inflamatorio del huésped.
Esta bacteria también parece estar relacionada con el aumento del grosor de la mucosa intestinal, lo que mejora la función de la barrera intestinal. A lo que se suma que otros estudios han revelado su papel antiinflamatorio en el entorno intestinal.
Por otro lado, se han demostrado los efectos beneficiosos de A. muciniphila en diferentes estudios, como el papel protector contra agentes patógenos, propiedades antitumorales, reducción de la inflamación, mejora de la permeabilidad intestinal y potenciación de la respuesta inmunitaria. Todo esto podría explicar por qué la presencia de A. muciniphila se ha asociado con un intestino sano.
Su escasez podría favorecer varios estados patológicos como la colitis ulcerosa y la enfermedad de Chron.
Por el contrario, su escasez podría favorecer varios estados patológicos como la colitis ulcerosa y la enfermedad de Chron. Las personas con apendicitis aguda presentan también una cantidad reducida de esta bacteria, menor cantidad cuanto más grave es la apendicitis. Y algo similar ocurre con la obesidad, la enfermedad del hígado graso y la diabetes.
Alteraciones en la presencia y abundancia de esta bacteria también se ha asociado con hipertensión, inflamación, epilepsia, problemas metabólicos, autismo, esclerosis lateral amiotrófica, cáncer, psoriasis, enfermedades alérgicas, párkinson, etc. Curiosamente, la bacteria pasteurizada, pero también las proteínas aisladas de la membrana externa de la bacteria, son más eficientes que las bacterias vivas viables para aliviar estos problemas de salud.
Por lo tanto, los productos bacterianos elaborados a partir de A. muciniphila o las proteínas que secreta podrían convertirse en nuevas herramientas terapéuticas contra las enfermedades metabólicas e inflamatorias crónicas.
La bacteria alimento. En septiembre de 2021, Akkermansia muciniphila pasteurizada fue la primera bacteria aprobada como alimento por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria. En realidad, no es un probiótico, ya que la bacteria no se administra viva, sino muerta, pasteurizada.
Aunque son necesarios nuevos estudios clínicos para confirmar su efecto beneficioso en la salud y para entender los mecanismos moleculares que hay detrás, Akkermansia muciniphila es un buen ejemplo de esas bacterias intestinales beneficiosas de las que tenemos mucho que aprender.