Las autoridades de seguridad de Guatemala anunciaron que se ha redoblado la vigilancia en las fronteras con El Salvador y Honduras. El objetivo es contrarrestar amenazas a nuestro territorio, provenientes de grupos delictivos.
Asimismo, debido a que el país es paso de migrantes, se realizan inspecciones para que el éxodo sea legal y ordenado, como lo ha promovido el Gobierno. Estas tareas se realizan en apego a las garantías individuales de las personas.
Con estas acciones se busca garantizar la integridad de la población guatemalteca y coadyuvar en el control territorial. Para ello, fue puesto en marcha el Plan Operativo 38-2022 Seguridad Interinstitucional en Fronteras del Triángulo Norte.
La tarea de vigilancia y resguardo de las fronteras es coordinada por el Ministerio de Gobernación (Mingob), por medio de unidades especiales de la Policía Nacional Civil (PNC).
A estos esfuerzos se ha sumado el Ejército, encargado del resguardo de la soberanía nacional. Su apoyo a las fuerzas de la PNC incrementa la vigilancia en delimitaciones territoriales y pasos clandestinos en el oriente y nororiente del país, lo que ordena el desplazamiento de migrantes e impide el ingreso de pandilleros.
Como parte de las acciones los elementos policiales realizan identificación de personas y vehículos, así como actividades de prevención. Ello garantiza que la movilidad humana sea bajo los requisitos de ley y evitar que en los automóviles se traslade objetos o sustancias ilícitas.
Las operaciones, que comenzaron el pasado lunes, permanecerán hasta el próximo 31 de diciembre. La vigilancia incluye puestos fronterizos y rutas de desplazamiento en Izabal, Zacapa, Chiquimula y Jutiapa.