Consejo Editorial Conadi
Las intensas lluvias propiciadas por la tormenta Julia, que posteriormente se degradó a depresión tropical, azotaron fuertemente a países centroamericanos y del Caribe.
En Guatemala, los departamentos más afectados fueron: Izabal, Suchitepéquez, Retalhuleu, Alta Verapaz, Escuintla, Santa Rosa, Jutiapa, entre otros. Precisamente, uno de los esfuerzos realizados en los últimos años por el Consejo Nacional para la Atención de las Personas con Discapacidad (Conadi) y organizaciones adscritas como la Asociación Nacional de Ciegos de Guatemala (ANCG), la Asociación de Sordos de Guatemala (Asorgua) y la Asociación Guatemalteca de Personas con Discapacidad (AGPD) Manuel Tot, entre otras, ha sido el involucramiento con entidades y organismos internacionales que promueven el tema de Gestión Integral de Riesgo ante desastres, con el objetivo de incluir a la población con discapacidad.
Debe continuarse trabajando en la creación de planes inclusivos y su implementación será clave para prevenir desastres naturales.
De acuerdo a la Encuesta Nacional en Discapacidad de 2016, la población con discapacidad asciende a 1 millón 600 mil guatemaltecos; el mismo estudio indica que la mayoría de personas con esta condición habita en el ámbito departamental, donde las barreras del entorno son mayores y la condición de pobreza, en gran medida, solo les permite asentarse en lugares considerados de alto riesgo.
Según la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), no existen desastres naturales, sino fenómenos climáticos que afectan a un territorio.
Sin embargo, un desastre natural puede suceder por la ausencia de un plan de prevención y reacción inmediata de la población ante un evento de este tipo. La inclusión o no inclusión de los grupos vulnerables; entre estos, las personas con discapacidad, determinará la eficiencia de este.
Entre el monitoreo realizado por el Conadi durante este fenómeno climático, se evidenció que la población con discapacidad empieza a figurar en las estadísticas y datos de informes de evacuaciones, acciones de salvamento y asistencia humanitaria.
Esta acción permitirá conocer en mayor medida, las necesidades de las personas con esta condición durante una emergencia. Debe continuarse trabajando en la creación de planes inclusivos y su implementación será clave para prevenir desastres naturales, donde los más susceptibles son los grupos vulnerables.
