El Colegio Francisco Coll, ubicado en la zona 3 capitalina, donde estudian la primaria hijos de padres y madres que trabajan en el relleno sanitario, fue pintado por la oenegé israelí Héroes por la Vida, integrada por voluntarios que se encuentran en nuestro país para ayudar a ciudadanos de escasos recursos.
“Es gente joven que está aquí para viajar como mochileros, pero también quieren dar y hacer algo bueno por el país. Este es un ejemplo más de la amistad que une a dos naciones”, afirmó Yiftah Curiel, embajador designado de Israel en Guatemala, quien hizo una pausa en las labores de pintura para hablar con los medios de comunicación.
Entre las actividades que realiza la citada entidad está el apoyo a las comunidades en remozar sus viviendas, tutorías a niños y jóvenes en materias como matemáticas, inglés y manualidades.
Manos amigas
El trabajo social de la oenegé en el país, desde 2017, estuvo suspendida durante 2020 y 2021, debido a la pandemia del Covid-19 y no fue sino hasta ahora que regresaron al territorio nacional.
“Estamos acá 27 voluntarios y 2 coordinadores, muy emocionados de volver a Guatemala y empezar de nuevo”, indicó Shajar Schapiro, coordinador de Héroes por la Vida.