En la era de la imagen, la fotografía es una de artes más apreciadas, junto a la televisión, el cine, la pintura y el dibujo.
Para celebrar el Día de la Fotografía se ha elegido el 19 de agosto, porque fue en esa fecha de 1839 cuando el inventor francés Louis-Jacques Daguerre presentó ante la Academia de Ciencias de Francia la primera imagen obtenida mediante la luz.
En la siguiente entrevista, Aldo Comparini, director de la Academia Enfocarte, se refiere a la importancia de este arte en la sociedad moderna.
¿Qué es la fotografía?
Es el registro en una imagen que capta, en una fracción de segundo, una situación que es importante en la vida de una persona o de un acontecimiento. Su valor va más allá del momento en que fue captada.
¿Qué cualidades debe tener un estudiante para ser fotógrafo?
La más importante es la convicción de que la fotografía es un medio para expresarse. Hay personas que traen el gusto, tienen buen ojo para los encuadres. Ellas tienen mayores posibilidades de aprender y llegar a ser buenos fotógrafos.
¿Eso significa que algunas personas tienen más aptitudes que otras?
Sí. Además de tener interés y pasión por la disciplina, es importante tener aptitudes, las cuales facilitan el desarrollo de las habilidades. Es muy importante la parte creativa. Hay personas que ya la traen y otras que no pero la pueden desarrollar. Con la práctica, y mediante una sucesión de aciertos y errores, se va adquiriendo.
¿La academia provee a los estudiantes de conocimientos especiales?
Lo que hacemos en la academia es dar herramientas con las que el alumno va a desenvolverse. Entre ellas está el conocimiento de la luz: la forma en que incide sobre los objetos, las sombras que se proyectan, el entorno ambiental. Puede afirmarse que hacer una fotografía es pintar con luz.
¿La automatización de las cámaras ha facilitado el trabajo del fotógrafo?
Es parte de la evolución. Antiguamente, las cámaras se operaban manualmente. Ahora, pueden hacer la combinación apropiada de velocidad, cantidad de luz y enfoque. Hay unas que siguen a la persona o a un objeto en movimiento y mantienen el enfoque. Finalmente, lo importante es la percepción del suceso y la interpretación que le da el fotógrafo.