Foto: Archivo
Dada la alta expulsión de lava del volcán Santiaguito, la cual avanza sobre el cauce del río San Isidro, la Municipalidad de Quetzaltenango impuso una restricción en un radio de 5 kilómetros a la redonda del coloso. Debido a lo inestable del material en el llamado domo caliente y por el avance de rocas fundidas se generan avalanchas y flujos piroclásticos, los cuales levantan gruesas cortinas de ceniza que llegan a alcanzar los 800 metros de altura.
Producto de los fuegos, el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) lamenta la quema de vegetación y árboles de la zona. La disposición municipal también prohíbe la permanencia dentro de las barrancas, por las secuencias piroclásticas débiles y moderadas que pueden causar daños severos, e incluso la muerte.
El volcán mantenía ayer columnas de gases de vapor blanco, de 500 metros de altura, y avalanchas de bloques que descienden desde el cráter en dirección
suroeste y sur.