Mildred M. Trigueros
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La vida de los jóvenes no es solo conseguir metas, obtener resultados o alcanzar objetivos. La vida de los jóvenes tiene que ser, vivir y sentirse bien, ser feliz y disfrutar de esta etapa de vida, ya que esto contribuye a su plenitud.
Las personas sobreexigentes eliminan la empatía de sus vidas, no tienen compasión hacia sí mismos, se autoaplican la dureza en todo lo que realizan y son perfeccionistas.
Hoy en día, la sobreexigencia en la juventud, aunque no lo parezca, no es algo bueno para ellos. Tener objetivos, querer superarnos, aspirar a mejorar y prosperar son sin duda aspectos positivos; sin embargo, las y los jóvenes en el afán de hacer cada cosa mejor y someterse a este tipo de sobreexigencia, se están vetando el derecho de ser jóvenes y esto les causa daño.
¡Feliz Día de la Juventud!
Cuando un joven se sobreexige y no logra sus metas y objetivos, se llena de frustración y esto perjudica su vida, pues lo hace adulto no feliz, con resentimientos. A raíz de la pandemia, muchos jóvenes se sumergieron en exigirse más de la cuenta; esto, por la inestabilidad emocional, que aún padecen, por los niveles altos de ansiedad y se han mostrado temerosos a las relacionales sociales; es decir, tímidos, con vergüenza y sentimientos de culpa; todo esto, para mostrar que son buenos, lo que genera competencia entre ellos y así se sienten más satisfechos de logar algo a costa hasta de su propia salud.
La sociedad en la que actualmente los jóvenes están viviendo impone estándares elevados de rendimiento, y es ahí donde el joven se sobreexige y no disfruta de su juventud, crece con la idea de que, para ser excelente y destacar, es necesario tener grandes logros, lo cual no está en discusión; sin embargo, muchas veces, ya no lo disfruta por la presión a la que se somete.
En el mes de la juventud, el Consejo Nacional de la Juventud (Conjuve) tendrá diversas actividades; varias de ellas, con el objetivo de que las y los jóvenes se puedan relajar, divertir, tener empatía e inclusión, actividades sanas, que puedan sacarlos de su encierro y hacerlos diferentes, que puedan hacer lo que les gustas sin ser necesario presionarse, lastimarse mental, emocional y psicológicamente.