Dr. Jorge Antonio Ortega G.
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Con el correr del tiempo las circunstancias de la Federación Rusa se están expandiendo en las operaciones militares, debido al apoyo recibido por occidente y las sanciones en el ámbito financiero están socavando el espacio financiero para las empresas rusas.
El sistema financiero ruso no estaba preparado para suministrar medios a las compañías que no tienen activo o grandes beneficios, “son problemas colosales”, afirmó Putin en una conferencia de prensa. La problemática es enorme luego de las sanciones impuestas por occidente, posterior a la invasión a Ucrania el 24 de febrero del año en curso.
El desafío es tremendo para la nación rusa. El Gobierno de la Federación está en la búsqueda de nuevas soluciones de una manera inteligente y enérgica, las cuales tienen como asidero el Kremlin, donde se recalca que no se pueden desarrollar al margen del mundo, es imposible que se logre en un estado de aislamiento como el actual.
El Gobierno ruso está en la búsqueda de nuevas soluciones de una manera inteligente y enérgica.
El mandatario ruso señaló que su nación buscará la soberanía tecnológica y productos de compañías locales innovadoras, asegurando que existe crecimiento en dicho ambiente y puso de ejemplo la tienda en línea Ozon y la compañía Yandex, a pesar de las sanciones. Es imperativo buscar alternativas para no paralizar la economía, reiteró el jefe del Kremlin.
El presidente destacó a las empresas claves y grandes corporaciones del país, resaltó los progresos de Sberbank, la mayor entidad bancaria de Rusia en inteligencia artificial, de ferrocarriles nacionales, en comunicaciones cuánticas, y de Rosatom, en materiales compuestos.
Pero, de las trece áreas de trabajo solo en cinco no hay avances y en las restantes no se han alcanzado las metas y se encuentran al 20 % de los indicadores. Las grandes compañías tecnológicas como Apple, Microsoft e Intel suspendieron sus actividades en Rusia o abandonaron el país, en rechazo a la invasión a la República de Ucrania.
Por lo anterior, el estamento gubernamental ruso se ve obligado a ser creativo en los escenarios financieros, no tiene alternativa, mientras mantengan la ofensiva militar en el territorio ucraniano. Al respecto, en las últimas noticias continúan los bombardeos en el norte y sur de Ucrania. El incremento se ve en la destrucción de instalaciones e infraestructura vital en la región de Sumy, en el norte del territorio invadido.
Se reportan también intensos ataques de artillería pesada, misiles, morteros y lanzamiento de granadas en la región de Odesa, en el sur del país.
Lo preocupante para Washington, según el vocero del Departamento de Estado, John Kirby, es la estrategia de Rusia, de hacer un falso referendo para dar legitimidad y legalidad a los territorios ocupados por tropas rusas para lograr su anexión, establecer el rublo como moneda oficial, colocar funcionarios del Kremlin en la administración pública y obligar a los ucranianos a hacerse ciudadanos rusos.
El vocero norteamericano informó que Estados Unidos anunciará en los próximos días un nuevo paquete de armas para Ucrania. Será la decimosexta entrega aprobada por el Congreso y asignada bajo la autoridad presidencial.
El envío incluye lanzacohetes móviles, conocidos como HIMARS, y cartuchos de lanzamiento múltiple de cohetes, así como munición de artillería.
Se agregan las presiones de la Organización Naciones Unidas para que las conversaciones sobre la liberación del tráfico marítimo en el Mar Negro lleguen a un acuerdo para poder distribuir los granos que se encuentran estancados en Ucrania y que se pueda evitar la hambruna a nivel mundial.
Estos son algunos de los componentes de la encrucijada rusa a resolver lo antes posible, evitando la expansión de la conflictividad, la devastación que produce la guerra, la muerte que se posesiona en el teatro de operaciones acumulando un sinfín de fallecidos innecesarios, la inflación galopante en el planeta y el desabastecimiento del mercado mundial.
