Leonel Guerra Saravia
[email protected]
En Guatemala está sucediendo que lo que estamos consumiendo está subiendo de precio. Debemos comprender que el costo de la carne no es culpa de los carniceros; el costo de la gasolina, el gas propano y el diésel no es culpa de los expendios de gasolina, entre otros.
Durante una presentación del panorama económico para el país, organizada por la Cámara de Industria Guatemalteca (CIG), se concluyó que Guatemala sufre, de forma parcial, una influencia en el aumento de precios que podría extenderse por tiempo indefinido, ya que este es derivado del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.
El vicepresidente del Banco de Guatemala (Banguat), José Alfredo Blanco, y el director ejecutivo del Central American Business Intelligence (CABI), Paulo de León, concuerdan en que el 80 por ciento de la inflación actual del país proviene de la crisis geopolítica entre Rusia y Ucrania, la cual ha repercutido en la volatilidad de los precios del petróleo, así como la escasez y/o el alza en precios de los cereales.
Debemos colaborar con las medidas preventivas que dicta el Ministerio de Salud Pública para minimizar ese impacto.
Por otra parte, con el bono 14 varios guatemaltecos no han aprendido a manejar su economía, y lo han invertido en cosas menos necesarias.
Los reportes del Banco de Guatemala evidencian un alza en los créditos bancarios por consumo. La economía laboral examina la organización, el funcionamiento y los resultados de los mercados de trabajo; las decisiones de sus participantes actuales y futuros, y las medidas relacionadas con el empleo y la remuneración de los recursos de trabajo.
La relación entre comercio y empleo es compleja. Es cierto que el comercio puede generar puestos de trabajo, pero también lo es que la competencia de las importaciones puede ser un factor de presión para los productores.
Debemos comprender que la pandemia del Covid-19 nos vino afectar en nuestra economía a los guatemaltecos; por tal razón, debemos colaborar con las medidas preventivas que dicta el Ministerio de Salud Pública para minimizar ese impacto. Además, el conflicto entre Rusia y Ucrania también causa un problema con nuestra economía.
Por todo lo anterior, es importante que invirtamos en lo más necesario. No es momento de buscar culpables y quién nos resuelva el problema económico. Unámonos y resolvamos nuestros problemas.