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El lenguaje que emplearon los miembros del Congreso de Estados Unidos entre 2009 y 2019 refleja un aumento del 23 por ciento en groserías, especialmente los demócratas, según un estudio publicado ayer.
Los tuits acerca del expresidente Donald Trump (2017-2021) dan cuenta del deterioro de los modales en el Congreso, apuntó Robb Willer, de la Universidad de Stanford (California) y uno de los coautores del estudio.
Los investigadores usaron inteligencia artificial para el examen de 1.3 millones de mensajes.
Los investigadores usaron inteligencia artificial para el examen de 1.3 millones de mensajes de Twitter enviados por congresistas en búsqueda de identificar el contenido grosero, al cual definen como rudo u ofensivo. Si bien las chabacanerías se encuentran en el lenguaje público, el estudio halló que la falta de respeto entre los miembros del Senado y de la Cámara de Representantes fue más notable entre los demócratas más “progresistas”.
23 por ciento creció el Twitter, revela estudio académico.
Esta diferencia partidista podría explicarse, en parte al menos, por las reacciones de esos legisladores al expresidente Trump.