Nieves Goicoechea
Investigadora del Instituto de Biodiversidad y Medioambiente
Por otro lado, la acumulación de compuestos de defensa puede ayudar a las plantas a frenar el ataque de patógenos que pueden colonizar nuevas áreas geográficas como consecuencia del calentamiento global y que todavía hoy son demasiado frías para su supervivencia y desarrollo.
El estudio de los efectos de los hongos micorrícicos sobre el crecimiento y funcionamiento de las plantas y sobre la calidad de los productos de origen vegetal incluidos en la dieta humana es una de las líneas de investigación del Grupo de Fisiología del Estrés en Plantas del Instituto de Biodiversidad y Medioambiente de la Universidad de Navarra.
Las investigaciones más recientes se han centrado en un contexto de cambio climático.
Las investigaciones más recientes se han centrado en un contexto de cambio climático y tienen a la vid como gran protagonista.
Recientemente, este grupo de investigación ha recibido financiación por parte del Ministerio de Ciencia de Innovación del Gobierno de España para desarrollar el proyecto titulado Contribución de los microorganismos edáficos beneficiosos a la adaptación de variedades comerciales de vid al cambio climático (Ref. PID2020-118337RB-I00) en el que se va a evaluar el papel que pueden desempeñar los microorganismos beneficiosos del suelo (especialmente hongos micorrícicos) en la adaptación de diversos cultivares comerciales de vid (variedades tintas) a condiciones ambientales futuras, prestando especial atención al incremento de la temperatura y de los niveles de CO2 en el aire, así como a la sequía. Los resultados derivados de este estudio podrían aportar una valiosa información para el asesoramiento de los viticultores.