Foto: EFE
El Barcelona tuvo que esperar a un cabezazo de Luuk de Jong, en el minuto 96, para sacar algo positivo del derbi contra el Espanyol, en el RCDE Stadium, un desenlace para un partido que acabó con Piqué y Nico Melamed expulsados en el tramo final.
Los blanquiazules estuvieron cerca de romper la historia de los derbis, ya que no ganaban en casa desde la temporada 2006-2007. Los periquitos superaron el gol de Pedri a los dos minutos, gracias a la precisión de Darder en el 40’ y a Raúl de Tomás en el 66’.
De todos modos, ya no tuvieron margen para reaccionar al tanto del neerlandés. Un cambio de pizarra que sí fue exitoso para Xavi Hernández, pues el delantero remató de cabeza en el 96’, y puso el 2-2 definitivo.
Piqué y Melamed fueron expulsados en un final de alta tensión. También Morlanes, en el banquillo.