En el Palacio Nacional de la Cultura se encuentran estos tesoros ornamentales que dejó el pintor, vitralista y escultor guatemalteco Julio Urruela Vásquez, realizados entre 1943 y 1945, los cuales retratan los momentos históricos del país. Los vitrales capturan la luz y crean una deslumbrante combinación de tonalidades, en los que predominan los rojos, azules y amarillos. Fueron elaborados a base de óxidos minerales.
Esmeralda Gallardo, vitralista y restauradora desde hace más de 25 años y graduada de la Escuela Nacional de Artes Plásticas Rafael Rodríguez Padilla, es la heredera de los conocimientos del maestro Carlos Hernández, quien a su vez fue alumno de Urruela. Cuenta que cada pieza lleva un proceso que debe cuidarse minuciosamente: “No es lo mismo hacer que restaurar, porque es vital basarse en la obra del artista”, indica.
DATO
El presidente Jorge Ubico pidió que se realizaran vitrales, por lo cual se designó al artista Julio Urruela para que se especializara en Francia.
“Todos estos años han sido especiales porque sé que pocos tienen esta oportunidad. Me siento satisfecha de poder restaurar la obra majestuosa del maestro Urruela Vásquez.” Esmeralda Gallardo Vitralista y restauradora
La colección de los vitrales:
Salón de Banquetes
Treinta y ocho vitrales ubicados hacia el balcón presidencial, en donde se plasman las 10 virtudes cívicas que debe poseer un gobernante. También se pueden observar los símbolos patrios: el quetzal, la bandera y la monja blanca. Arriba se miran los ojos de buey o rosetones y medios puntos.
Salón de Recepciones
Se hallan 14 vitrales; 7 representan a la Época Precolombina maya y la Época Colonial. Están ilustrados Tecún Umán, Pedro de Alvarado, el sacerdote maya Balún Votán, el obispo Francisco Marroquín, Beatriz de la Cueva, cacería maya, la imprenta y astronomía, entre otros.
Pasaje Sexta
Aquí se encuentran los 10 vitrales más grandes, con temática histórica de la literatura, que representan fragmentos de poemas de diferentes autores como: Epístola Guatemala, El Lago, La Tentativa del León, El Pavo Real, La Fuente del Bosque y El Relox, por mencionar algunos. Asimismo, aparecen los que simbolizan la fauna y flora guatemaltecas.