Problemas de suministro, tanto de chips como de otros componentes, están causando nuevas dificultades a los fabricantes de automóviles General Motors (GM), Ford y Honda, que advirtieron que reducirán aún más la producción de vehículos.
GM, el mayor fabricante de automóviles de Estados Unidos, dijo recientemente a los empleados de la planta de montaje de Orion
(EE.UU.), donde se fabrica el vehículo eléctrico (VE) Chevrolet Bolt EV, que la producción disminuiría por problemas en el suministro de paquetes de baterías.
Los problemas están relacionados con la ampliación de la llamada a revisión que la citada compañía se vio obligada a realizar el 20 de agosto pasado, para solucionar un defecto con las baterías del vehículo y que afecta potencialmente a todas las unidades producidas desde 2016.
“Debido a los problemas, algunos modelos resultarán más impactados que otros.” Comunicado Honda
Las baterías, que fueron producidas por LG en Corea del Sur, tienen dos defectos: un ánodo desgarrado y un separador doblado, que aumentan el riesgo de incendio de las baterías. GM indicó en su momento que trabajaba con LG para averiguar las causas de los
defectos.
Mientras, Honda advirtió a sus concesionarios en Estados Unidos en una carta que también podría reducir las entregas de vehículos hasta un 40 por ciento con respecto a lo previsto inicialmente, por problemas con sus proveedores en Asia. La carta, publicada por varios medios de comunicación especializados, señala que “algunos modelos resultarán más impactados que otros”, pero que las entregas de los modelos Pilot y Passport “se espera que permanezcan constantes”.
Ford también está teniendo problemas añadidos con el suministro de chips que lo obligarán a recortar de nuevo la producción de su vehículo de más ventas y el más rentable, la camioneta “pickup” F-150, así como los todocaminos SUV Ford Edge y Lincoln Nautilus.
La compañía confirmó que la planta de montaje de Oakville (Canadá), que produce Edge y Nautilus, suspendería la producción y que lo mismo tendría que hacer la planta de Kansas City
(EE. UU.), donde se monta la F-150. Además, la compañía había anunciado el recorte de dos de los tres turnos de trabajo de la planta de montaje de Dearborn (EE. UU.), que también produce la camioneta F-150.
EFE Washington
