Como estudiante aprendí que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) nació oficialmente el 24 de octubre de 1945, luego que 51 Estados, entre ellos Guatemala, firmaran su documento fundacional, conocido como la Carta de las Naciones Unidas. A partir de ese momento, y en conjunto con una resolución emitida por la Asamblea General, en 1971, el 24 de octubre se convirtió en una fecha especial, cuando se conmemoran los esfuerzos que la ONU ha realizado para contribuir a la paz y seguridad internacional.
Este año también he conocido de cerca el trabajo que realizan sus veinte agencias, fondos, programas y organismos especializados presentes en Guatemala. La ONU acompaña al país en el desarrollo integral de todas y todos, con el objetivo de “no dejar a nadie atrás”, de eso trata la Agenda 2030 y sus 17 ODS.
He podido participar de las tareas de la ONU, coincidiendo con sus 76 años de fundación.
Con el paso del tiempo la ONU ha ido evolucionando, con el fin de seguir el ritmo y las demandas de un mundo que se encuentra en un constante cambio. Sin embargo, una cosa permanece igual: las Naciones Unidas sigue siendo el único lugar en donde todas las naciones, a pesar de sus diferencias, pueden reunirse para discutir los distintos problemas y necesidades que aquejan a la comunidad internacional, buscando la manera de encontrar soluciones que beneficien a todas y todos. Por lo que, a lo largo de sus 76 años, la ONU ha trabajado arduamente para contribuir con los Estados y con quienes más lo necesitan, siendo conscientes de la diversidad y las distintas realidades existentes. Asimismo, la ONU ha hecho un gran esfuerzo por trabajar en los factores de inclusión, equidad, desarrollo, medioambiente, innovación y tecnología, buscando aportar en gran medida a las sociedades. En Guatemala, uno de los muchos trabajos que realiza la ONU con juventudes es el brindar apoyo en sus pasantías universitarias, en donde la organización le abre sus puertas a las y los estudiantes, para que puedan aprender nuevas herramientas y técnicas que les permitan crecer en el ámbito laboral, académico y personal.
Es gracias a esa oportunidad que hoy en día formo parte del equipo de pasantes de las Naciones Unidas, en donde he podido comprender de mejor manera su labor, importancia y contribución a la sociedad. Por lo que, el 24 de octubre no solo se conmemora el nacimiento de esta organización internacional, sino que también reconoce todos los esfuerzos realizados para hacer un mundo mejor.