Megaconstrucción futurista de Estambul reina en el horizonte de Asia y Europa.
La moderna edificación de telecomunicaciones ubicada en Estambul, Turquía, con 369 metros de altura y un restaurante mirador de 360 grados, donde puede observarse Asia y Europa, será abierta al público al final de la primavera, informaron sus diseñadores.
La megatorre está situada en una de las colinas de Camlica, inspirada en el viento y el paisaje. Y, según los autores del proyecto, da una sensación de movimiento y ritmo dentro de una silueta que cambia cuando se ve desde diferentes lugares. En definitiva, marca un hito visual en la línea de edificios de esta histórica y animada ciudad, denominada primeramente Bizancio y después Constantinopla.
Según Melike Altinisik, quien dirigió la obra, es “un edificio que se convierte en un espacio de diálogo y exploración, al albergar una plataforma de observación que abarca desde Asia hasta Europa”.
La construcción superó exhaustivas pruebas de viento, tanto para confirmar la estabilidad de toda la estructura monumental, que aloja 125 antenas de trasmisión, como para diseñar su fachada, que combina elegancia y belleza geométrica, por lo que esperan sea símbolo del crecimiento de la ciudad, la cual ya supera los 15 millones de habitantes.
369
metros de altura tiene la nueva construcción.
Esta estructura, de 29 mil metros cuadrados de superficie, que también se conoce como Torre de Camlica, comenzó su construcción en 2015, “y su llamativa fachada parece una onda sonora congelada en el tiempo”, según la revista de diseño y arquitectura STIR.
“Cuenta, dentro del podio de entrada, con un vestíbulo público, cafetería, sala de exposiciones y áreas de mediateca, cuyos interiores se han diseñado buscando que el edificio incluya espacios únicos que ofrezcan una experiencia innovadora y contengan características futuristas”, añade Altinisik.
“La arquitectura de esta torre de telecomunicaciones busca crear encuentros sorprendentes estableciendo sólidas relaciones con el lugar donde se ubica, utilizando la luz, la naturaleza y los espacios, para poder cambiar la perspectiva de las personas y animarlas a pensar de una manera diferente”, puntualiza.
Los ascensores panorámicos, situados a ambos lados del edificio, llevarán a los visitantes en un viaje vertical de 180 metros, verdaderamente inolvidable.
Redacción, EFE.