Con una serie de propuestas económicas, sociales y ambientales, para la recuperación pos covid-19 en la región, concluyó hoy la XXVII Cumbre Iberoamericana, celebrada en Andorra, cuyo lema fue Innovación para el desarrollo sostenible, objetivo 2030.
Dicho evento, a donde asistió el presidente Alejandro Giammattei, se constituyó en un espacio único de diálogo político y cooperación regional, que apuesta por el multilateralismo como la herramienta más eficaz para compartir experiencias y encontrar las soluciones.
En dicho encuentro estuvieron representados los 22 países de la región, lo que ha ocurrido en todas las Cumbres, desde 1991, señala un comunicado.
En ese contexto, los líderes políticos de todos los países participantes, adoptaron la Declaración de Andorra, el compromiso sobre Innovación para el Desarrollo Sostenible y el Programa de Acción, que fueron acordados por todos, así como 16 comunicados especiales, aprobados por consenso.
En el ámbito sanitario, destacaron algunas propuestas hechas por Ecuador, Perú y Chile, sobre la garantía del derecho a la salud por medio del acceso, equitativo, transparente, oportuno y universal a las vacunas en respuesta a la pandemia.
Asimismo, los comunicados especiales entorno a la deuda y financiamiento, cobraron relevancia por contener iniciativas tendientes a la recuperación económica pos Covid-19.
Finalmente, los temas sobre medio ambiente, sostenibilidad, desertificación, cambio climático y medio ambiente, armonía con la naturaleza, agua para la vida y energía sostenible, fueron discutidos.