La monumental y popular escultura Orpheus and Apollo, del estadounidense Richard Lippold, podrá ser
admirada en el aeropuerto neoyorquino de LaGuardia tras no haber sido vista
durante más de siete años, después de que el Lincoln Center la retirara de uno
de sus vestíbulos por la renovación del espacio en 2014.
Según anunció hoy el gobernador de Nueva York,
Andrew Cuomo, la mudanza de la pieza, de cinco toneladas de peso y formada por
190 barras de metal resplandeciente, es resultado de un acuerdo alcanzado entre
el Lincoln Center y las autoridades de Nueva York y Nueva Jersey encargadas de
la reforma que se está llevando a cabo en el aeropuerto de LaGuardia.
“El nuevo aeropuerto de LaGuardia ofrecerá una
experiencia de primera categoría a los viajeros que refleja lo que es Nueva
York, y dado que nuestro estado es un destino cultural excelente, queremos
asegurarnos de que nuestros aeropuertos están a la altura de esa reputación”,
apuntó Cuomo en un comunicado remitido a la prensa.
Orpheus and Apollo
fue instalado en 1962 en el gran vestíbulo David Geffen (entonces llamado
Vestíbulo Filarmónico) del Lincoln Center tras haber sido donado por la
Fundación Ittleson y se apartó más de medio siglo después con las renovaciones
del edificio.
La imponente pieza está formada por barras de metal
Muntz (compuesto por un 60 por ciento de cobre y un 40 por ciento de zinc) que
están suspendidas individualmente del techo con cables de acero, pero en 2020
el Lincoln Center anunció que no podía volver a colgarla en sus instalaciones
después de las modificaciones a las que habían sido sometidas.
Fue Paul Goldberger, un arquitecto que ha
trabajado como asesor tanto en la renovación de LaGuardia como en la del
Lincoln Center, quien tuvo la idea de exponer la obra en el aeropuerto cuando
supo que la mayor institución de artes escénicas de EE. UU. no la iba a volver
a colocar en sus instalaciones.
En concreto, Orpheus
and Apollo se podrá ver en el Vestíbulo Central de LaGuardia, una gran sala
formada por grandes ventanales que conecta el tren con la nueva Terminal B del
aeropuerto, que se prevé abrirá sus puertas en 2022 tras un proyecto de
reforma.
Por ello, el nuevo hogar de la escultura se parecerá mucho al
antiguo, donde permanecía en una gran sala acristalada, y podrá ser observado
desde distintos puntos de vista, tanto desde dentro como desde fuera del propio
edificio.
La obra maestra de Lippold se unirá así a otras
importantes piezas que han sido instaladas en los espacios públicos de la
Terminal B de Sarah Sze, Laura Owens, Jeppe Hein y Sabine Hornig, además de una
escultura de agua y luces llamada Aquatique
Show que entretendrá a viajeros en la zona de tiendas del aeropuerto.
Lippold, un diseñador industrial que se convirtió
en artista, fue uno de los escultores más importantes de EE. UU. durante la
posguerra, y sus piezas aún pueden verse en algunos de los edificios más
importantes de Nueva York, como el Met Life o el Seagram, ambos en Manhattan.
- Agencia EFE