Sin apoyo fiscal, los ingresos brutos hubieran cerrado en -4.1 %, debido al confinamiento.
Los factores que mantuvieron la economía del país en 2020 y las proyecciones para este año fueron discutidas en un foro organizado por el Instituto para la Competitividad Empresarial, y en el cual participaron los ministros de Economía, Antonio Malouf, y de Finanzas Públicas, Alvaro González Ricci, así como el presidente del Banco de Guatemala (Banguat), Sergio Recinos.
Recinos expuso que medidores como el Índice de Confianza de la Actividad Económica y el Índice Mensual de la Actividad Económica demuestran cómo el producto interno bruto (PIB) refleja una recuperación, como efecto de las acciones de contención implementadas por el Gobierno para mermar el impacto del Covid-19 en la economía de los hogares y las empresas.
En ese sentido, el jefe de la cartera del Tesoro refirió que los gastos para atender la pandemia (Q13 mil 530.1 millones) representan el 14 % del gasto público total, y significaron la mayor respuesta fiscal ante la grave recesión económica.
Sin ese estímulo fiscal, el PIB nacional hubiera retrocedido 2.6 puntos porcentuales más y habría tenido un cierre de -4.1 %, contrario al -1.5 % que estima el Banguat, manifestó González Ricci.
El Fondo Monetario Internacional calcula que la economía guatemalteca cerró en -2 %, y habría sido en Latinoamérica la menos impactada por la pandemia. Para este año, las proyecciones del banco central apuntan a una expansión de 3.5 %.
Con el objeto de materializar ese crecimiento, Malouf señaló las acciones que se implementarán desde la cartera económica; entre estas, la atracción de inversiones, cuya meta es la captación de USD 1 mil 200 millones.
Sin mayores efectos
En un foro paralelo organizado por la Cámara del Agro, Paulo de León, de Central American Business Intelligence, indicó que, contrario a la mayoría de sectores, el agro tuvo un crecimiento sano en 2020, y las proyecciones para este año son positivas.