Un gol del portugués Cristiano Ronaldo, que volvió a ser decisivo en una cita grande luego de no ver puerta en los últimos dos partidos, unido a un tanto del español Álvaro Morata, le dio ayer a la Juventus la novena Supercopa de su historia, gracias al triunfo por 1-0 logrado contra el Nápoles en el Mapei Stadium de Reggio Emilia.
Después de la dura derrota sufrida el domingo contra el Inter de Milán, que complicó notablemente las ambiciones de retener el título liguero por décimo año consecutivo, la Juventus recuperó su índole competitiva y se llevó el primer trofeo de la temporada sobre un Nápoles en el que Lorenzo Insigne falló el penal del posible empate, en el 80.
Es el primer título de la carrera de entrenador de Andrea Pirlo y el noveno para su Juventus, después de los triunfos de 1995, 1997, 2002, 2003, 2012, 2013, 2015 y 2018, antes del de ayer.
Y es el número 29 de la carrera de Cristiano con los clubes, el 31 si se consideran también la Eurocopa y la Liga de Naciones UEFA levantadas con la selección portuguesa. Roma, EFE