Nueva York, EFE.- Sarah Thomas, de 47 años, será única entre los 7
árbitros designados para la edición 55 del Super Bowl, que se disputará el 7 de
febrero en Raymond James Stadium de Tampa (Florida), anunció ayer la Liga
Nacional de Fútbol Americano (NFL).
Thomas, quien en 2015 hizo historia al convertirse en la primera árbitra
permanente en la historia de la NFL y 4 años después agrandó su leyenda al
dirigir un partido de play offs,
ejercerá en el Super Bowl como jueza de Downs.
El árbitro central del crucial encuentro será Carl Cheffers, con 21 temporadas
de experiencia en la NFL.
Otros cuatro miembros del equipo, el árbitro Fred Bryan, el juez de línea Rusty
Baynes, el juez lateral Eugene Hall y el juez auxiliar Dino Paganelli, han
trabajado al menos en un Super Bowl.
El juez de campo James Coleman también fue elegido por primera vez.
La NFL selecciona a su equipo de árbitros para el Super Bowl con rigurosos
criterios de desempeño durante la temporada y un mínimo de cinco años de
experiencia.
Sarah Thomas ya ha estado en cuatro partidos de play offs.
El vicepresidente ejecutivo de operaciones de la NFL, Troy Vincent, destacó el
martes el elevado nivel de Thomas.
“Sarah Thomas ha vuelto a hacer historia como la primera mujer en el Super
Bowl. Su desempeño de elite y su compromiso con la excelencia le han valido el
derecho de arbitrar en el Super Bowl. Felicitaciones a Sarah por este bien
merecido honor”, dijo.
El Raymond James Stadium, sede del partido número 55 del Super Bowl, es la casa
del Tampa Bay Buccaneers, que el domingo disputará con los Green Bay Packers el
partido de Campeonato de la Conferencia Nacional (NFC).
Un triunfo les colocaría en la lucha por el título de la NFL en su propio
campo.
Los Buccaneers tienen este año como gran adquisición al legendario mariscal de
campo Tom Brady.