Pide apostar por el diálogo y la unidad como camino hacia la paz duradera.
En conmemoración del 24 aniversario de la firma del Acuerdo de Paz Firme y Duradera, que se realizó el 29 de diciembre de 1996, el presidente Alejandro Giammattei llamó a un replanteamiento de los convenios que concluyeron con el cese de actividades bélicas, e invitó a apostar por el diálogo y la unidad como un firme camino hacia la paz permanente.
“La paz no debe ser una simple referencia al pasado, sino un compromiso con el presente y el futuro del país”, dijo el mandatario en el inicio de su participación en el acto de celebración, que se llevó a cabo ayer en el Patio de la Paz, del Palacio Nacional de la Cultura.
El Jefe de Estado consideró que en los últimos años se ha avanzado en el cumplimiento de los compromisos, pero reconoció que aún falta camino por recorrer para solventar los problemas que siguen afectando a los guatemaltecos. “Debemos reafirmar nuestro compromiso con el diálogo y la construcción de una paz firme y duradera”, anotó.
En este sentido, invitó a todos los sectores a trabajar en unidad por la paz y la transformación del país. “Entablaremos el diálogo con el pueblo y la comunidad internacional, para trabajar incansablemente porque ni un solo guatemalteco quede marginado”, expresó.
Exhortó a la ciudadanía a trabajar unida en la reestructuración de los compromisos de paz, no para criticar lo que se ha dejado de hacer, sino para actuar y contribuir en los cambios que Guatemala necesita.
“Quiero lanzar la idea del replanteamiento de los Acuerdos de Paz, no para echarnos en cara lo que hace falta, sino para que comencemos a pensar y hablar de los cambios estructurales que necesita el país”, destacó.
Manifestó que el presente es el momento perfecto para “replantearnos las causas que dieron origen a esos acuerdos” y honrarlos. “Hay que reconocer el valor de luchar por la paz y entregarlo todo al diálogo, la concertación y los compromisos. Hoy debemos tener el valor para honrar esos compromisos y cumplirlos”, puntualizó. Como parte de la conmemoración de los Acuerdos de Paz, el Gobierno rindió homenaje a Catalina Soberanis, Manuel Conde Orellana y Gustavo Porras, signatarios de aquellos compromisos.
Porras expresó que la paz no significa que todos pensemos lo mismo, puesto que las discrepancia y contradicciones son inherentes a la naturaleza humana. Además, mencionó que la paz no lleva a la supresión de la diversidad ni de los intereses contrapuestos, sino resolver la conflictividad sin violencia y en el marco de la institucionalidad.
“Lo que sí se puede afirmar de manera contundente es que con los Acuerdos de Paz se abrió la puerta para una Guatemala distinta, aunque quede mucho por hacer. La tarea fundamental que sigue pendiente es colocar al Estado en los niveles de eficiencia y probidad que su población reclama”, externó.
Conde sostuvo que 24 años se dice fácil, pero ha transcurrido un tiempo suficiente en el que los guatemaltecos hemos aprendido a valorar la paz como el término de la finalización de la lucha armada interna.