Justin Bieber celebrará su primer concierto en tres años, el próximo 31 de diciembre, vísperas de Año Nuevo, en un formato en vivo que será emitido a todo el mundo vía streaming para, según sus palabras, “darle juntos una patada al 2020 de forma segura”. Según informó su discográfica, el acceso será mediante una entrada de €25 (Q238.8) a través de la web justinbiebernye.com.
El artista, que no pisa un escenario desde 2017, no ha tenido un mal año dentro de lo que cabe. En febrero publicó su quinto disco de estudio, Changes, que aunque no tuvo la misma acogida popular que sus predecesores, llegó al número 1 en EE. UU. Además, le aportó tres nominaciones a los Grammy, como la de Mejor Álbum de Pop Vocal.
Más repercusión han tenido temas que lanzó en los últimos meses, como Monster, su colaboración para el último disco de su compatriota Shawn Mendes, o sobre todo Holy, junto a Chance The Rapper.
Casado con la modelo Hailey Baldwin, desde finales de 2018, Bieber ha estado muy centrado en su salud en los últimos años. Él mismo reconoció que en el pasado abusó de las drogas y que, “superado” por “el oficio, las responsabilidades, las emociones, la familia, las finanzas y las relaciones”, luchó contra la depresión y la ansiedad y el deseo que “no querer vivir más”.
Por si fuera poco, y ante los rumores que había despertado su deterioro físico, a principios de este año anunció que le habían diagnosticado la enfermedad de Lyme, que se contrae por la picadura de garrapatas, así como mononucleosis infecciosa, una afección vírica.
