En 1993, Matt Groening, creador del programa animado The Simpsons, estaba desencantado con lo que percibía como una ausencia de cómics humorísticos en la industria. “Al entrar en una tienda de cómics, lo único que veía era austeros títulos de ciencia ficción o superhéroes”, relataría más tarde. Fue por ello que decidió fundar su propia editorial, a la cual llamó Bongo Comics, en honor de un personaje de la tira Life in Hell, también creada por Groening.
Aunque Bongo era una empresa independiente, se concentró principalmente en crear historias ambientadas en el universo de los Simpson. Los primeros cuatro títulos fueron Simpsons Comics, Radioactive Man, Itchy & Scratchy y Bartman. Con el tiempo incorporarían más títulos relacionados con los Simpson, como Simpsons Illustrated y Treehouse of Horror, para alcanzar un total de 16.
A lo largo de los años, la editorial publicaría decenas de cómics de un solo número (one-shots), también ambientados en la mitología Simpson. En 2000, la empresa lanzó el título Futurama Comics, basado en el programa animado del mismo nombre. Ambos universos colisionaron en el crossover Futurama Simpsons Infinitely Secret Crossover Crisis y, nuevamente, en The Simpsons Futurama Crossover Crisis II, cuyos títulos parodian a los eventos Crisis on Infinite Earths, Infinite Crisis y Final Crisis, de DC Comics.
Bongo también publicó series de otros creadores, como Sergio Aragonés Funnies, creada por el legendario humorista, y SpongeBob Comics, basada en el popular personaje animado de Nickelodeon. Uno de sus proyectos más interesantes fue Mylo Xyloto (2012), un cómic de fantasía espacial desarrollado junto a la banda musical Coldplay.
La editorial produjo material de calidad y ganó reconocimientos de la industria, incluyendo varios premios Eisner. Bongo, además, funcionó como una lanzadera para nuevos talentos, como la dibujante Nina Matsumoto y los guionistas Ian Boothby y Gail Simone.
Todo parecía ir bien hasta que, en la San Diego Comic-Con 2018, la empresa dejó caer una bomba a sus fans: en octubre de ese año, Bongo cerraría sus puertas.
A dos años de su desaparición, todavía no se tienen datos sobre la razón exacta de su súbito ocaso. Es probable que la venta de 21st Century Fox, en 2018, haya tenido algo que ver, pues tanto The Simpsons como Futurama pasaron a manos de The Walt Disney Company (WDC).
Hay un antecedente: desde 1991, Dark Horse Comics había publicado cómics basados en los personajes del universo Star Wars. Cuando WDC compró Lucasfilm, en 2015, anuló la licencia de Dark Horse y, a partir de entonces, todos los cómics de Star Wars han sido publicados por otra de las empresas de Disney, Marvel Comics.