Barcelona, EFE).- El entrenador del Barcelona, Ronald Koeman, consideró que “la roja a Gerard Piqué es un castigo demasiado fuerte” después del 5-1 del conjunto azulgrana al Ferencvaros en el primer partido de la fase de grupos de la Liga de Campeones.
“No entiendo por qué el árbitro ha sacado una tarjeta roja en esta jugada. Si considera que es penalti, con una amarilla hubiese sido suficiente”, añadió a la conclusión del encuentro.
Pero en líneas generales el técnico azulgrana admitió “estar contento con el partido” de su equipo, “porque ha habido momentos en los que hemos hecho un fútbol muy bueno”.
“A veces, bajamos un poco el ritmo y eso nos pone en problemas, pero en general hemos estado bien. Los mejores minutos han sido los veinte primeros y después hemos sabido jugar bien en el tramo final con uno menos”, añadió.
Respecto al buen rendimiento de los atacantes azulgranas ante el Ferencvaros, Koeman explicó que “hay gente arriba que tiene mucho rendimiento y en este partido se ha demostrado. Poseen calidad y encima pueden marcar goles”.
Además, reconoció que “si Messi hace un partido como el de esta noche, “no tiene motivos” para quejarse: “Ha marcado y ha dado dos asistencias. No se puede pedir más”. También se felicitó “por la competencia que hay” y aseguró que “Trincao está en disposición de disputarle el puesto a Griezmann, igual que a otros jugadores”.