El centro se habilita hoy, aunque con estrictos protocolos de bioseguridad.
Contribuyendo a la reactivación económica del país, y abriendo espacios para la sana y segura distracción de la población, el presidente Alejandro Giammattei participó ayer en el acto de reapertura del Zoológico La Aurora.
“Poco a poco hemos ido entrando en la nueva normalidad que, forzosamente, nos obliga a tomar medidas e implementar protocolos que permitan ir abriendo de nuevo los espacios que se vieron afectados por la pandemia de coronavirus”, dijo el gobernante durante su participación.
Expresó que estas acciones son posibles gracias al trabajo realizado por el doctor Edwin Asturias desde la Comisión Presidencial de Atención a la Emergencia COVID-19 (Coprecovid) y los esfuerzos del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS), que han permitido generar protocolos para muchas áreas, ayudando a que la reactivación y reapertura del país sean una realidad.
Según el mandatario, el recinto se habilitará en un 35 % de su capacidad para la recepción de personas, y que por estar el municipio de Guatemala en alerta roja, no se pondrán a funcionar las atracciones mecánicas ni las áreas de comedores.
Las medidas
Durante la actividad se dieron a conocer las medidas obligatorias que deberán asumir los visitantes, que incluye la toma de temperatura y habilitación de espacios para la desinfección del calzado, así como uso de alcohol en gel y de la mascarilla. No se permitirá la ingesta de alimentos y bebidas ni se autorizará el ingreso de núcleos familiares mayores a seis personas.
Las familias no podrán interactuar con otras, deberán mantener la distancia de 1.5 metros entre personas y evitar tocar los barandales y otros equipos de uso público del parque.
“Los protocolos nos ayudan, sin duda alguna, a asegurar el mayor número de posibilidades que no haya contagio”, expresó el Presidente.
En cuanto al comportamiento de la pandemia, el Jefe de Estado afirmó que ha bajado la incidencia de casos por cada 100 mil habitantes, y esto influye en la cantidad de personas que se puedan recibir en los espacios permitidos con la reapertura de actividades.